La Editorial
22/02/2023
El alcalde de San Cristóbal de las Casas, Mariano Díaz Ochoa, no sale aún de un embrollo y ya está metido en otro.
Aún se recuerda sus dichos de cuando tenía “media estocada” por haber ingerido posh (aguardiente de maíz), que lo llevó a insultar a vecinos del barrio La Candelaria por un estira y afloja de obra pública.
El presidente municipal surgido del Partido Verde Ecologista de México enfrenta hoy un juicio para la protección de derechos políticos electorales y ciudadanos, interpuesto por la síndica del ayuntamiento coleto, Victoria Ruíz Olvera.
Ocurrió que don Mariano, en sesión privada, pidió que se retirara la firma de la funcionaria de la documentación oficial, dígase, por citar, los cheques emitidos por el gobierno municipal.
El argumento para dejar fuera a la síndica fue para “hacer más eficiente” el procedimiento, aunque según la ley, la sindicatura es la responsable de vigilar la hacienda pública municipal.
Otra responsabilidad de Victoria es participar en controversias y litigios legales y verificar los cheques de caja de la tesorería. Así que la totalidad del asunto financiero y de recursos le compete a la ignorada funcionaria.
Estando el suelo tan parejo, porque entonces tantos brincos del alcalde coleto?, que podría enfrentar asimismo, una denuncia por violencia política en razón de género, y otra más ante la Fiscalía General por presuntas irregularidades financieras.