Óscar Gutiérrez
La Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) inició dos expedientes de queja y una medida cautelar por la agresión de policías municipales de Tapachula a un grupo de reporteros cuando cubrían el desalojo de manifestantes de dos ejidos en esa región fronteriza de Chiapas.
La Comisión abrió la indagatoria por probables violaciones a los derechos humanos de pobladores de Pavencul y Toquián Grande, que reclamaban mejoras de caminos y esclarecimiento legal del homicidio de dos pobladores.
Asimismo, por las agresiones a los reporteros Julio Navarro Cárdenas, Alejandro Gómez, Damián Sánchez Adrián y Sergio Liébano.
En los expedientes de queja CEDH/0072/2020 y CEDH/0073/2020, iniciados por el organismo defensor y radicados en contra de agentes de la Policía Municipal, se incluye la agresión y detención de la activista Cinthya Alvarado Enríquez.
Se emitió también la medida cautelar CEDH/MPC/009/2020 para garantizar la seguridad, la integridad física y el derecho a la libertad de expresión y manifestación pacífica de ciudadanos.
El organismo de derechos humanos recopiló testimonios de agredidos. Las denuncias fueron por uso excesivo o indebido de la fuerza pública, negativa o injerencias arbitrarias en la libertad de expresión y de ideas, así como aprehensión arbitraria.
Ayer, lugareños de Pavencul y Toquián Grande protestaron por mejoras de caminos y justicia por el homicidio de dos pobladores.
Aunque había una mesa de diálogo, la Policía desalojó a los manifestantes que bloqueaban el centro de esa ciudad. En la zacapela fueron detenidas 40 personas.