La Editorial
27/09/2022
El alcalde de Ocozocoautla de Espinosa, Javier Alejandro Maza Cruz, emanado de Morena, empezó a aprender una de las primeras reglas de oro de la política: tragar sapos sin hacer gestos.
No es gratuito lo que pasa con el médico, a quien como consecuencia de sus dichos misóginos lanzados contra la comunidad LGBTTTIQ+, se le interpuso una queja ante el Conapred.
Fue obligado a recibir cursos de igualdad, prevención de violencia de género, y respeto a la diversidad, para evitar la repetición de sus expresiones.
En junio pasado al alcalde se le fue la lengua contra el feminismo y la homosexualidad. “Esas cosas, pueden verse como normales, pero no lo son”.
“Ya en plática con muchos chicos, ya traen eso en su cabeza”, dijo el servidor público.
Sus palabras tuvieron rebote, y fue sometido al respeto y la tolerancia que tanto presume su partido para que estigmatice a nadie.
Maza Cruz irá aprendiendo y, se espera, practicando, que los gobiernos responsables se rigen por el reconocimiento de los derechos, no por los falsos dogmas, y menos aún por las emociones
Gobernar es un ejercicio de diario aprendizaje, y cuando se realiza con modestia y humildad los resultados son mucho mejores.