De octubre de 2019 a febrero de 2020 en Tuxtla Gutiérrez se han registrado más de 16 casos de suicidios, los cuales han sido en diferentes edades, desde los 8 años hasta adultos mayores de 80 años que se han quitado la vida, por lo que no existe un patrón a seguir o coincidencia en estos casos.
Isidro Hernández Cruz, coordinador Estatal del Área de Socorro de la Cruz Roja, subrayó que en este período de tiempo se han registrado un incremento en las llamadas por reporte de personas que se han quitado la vida. En la mayoría de las ocasiones los familiares tratan de ayudar a las víctimas bajando o cambiando de lugar los cuerpos, por ello, resulta complicado hacer un dictamen de inmediato.
Cabe recordar que en octubre del año pasado, un menor de 8 años se quitó la vida y en enero de 2020 una mujer de 84 años se suicidó, por lo que se tiene un parámetro de referencia bastante grande, ya que las edades continúan variando desde los 13 a los 18 años, por lo que al ser un problema que está bajando a poblaciones de diferentes edades es necesario implementar medidas de prevención en niños, jóvenes y adultos mayores.
Asimismo, dio a conocer que en conjunto con el ayuntamiento capitalino se lleva a cabo jornadas de prevención, sobre todo en escuelas secundarias y preparatorias, los cuales son el sector más vulnerable y considerado como foco rojo en la capital chiapaneca.
De acuerdo a su experiencia, en la población continúa un tabú en lo que respecta a pedir ayuda psicológica a pesar de que existen espacios donde encontrar especialistas que atiendan en caso de presentar un problema psicosocial. La población relaciona al psicólogo con la locura, cuando esto no tiene nada que ver.
Por último, señaló que los signos de alarma son ausentismo, enclaustramiento en las redes sociales, aislamiento de la familia y es, donde inmediatamente se debe atender, prestar atención y buscar ayuda para que no se llegue a una condición fatal.