Tapachula, Chiapas. El negocio de armas de fuego se ha vuelto muy normal en Tapachula, con un buen contacto pueden cruzarlas de Guatemala y El Salvador, modelos, hay demasiados para escoger entre las cortas y las de alto poder, los precios varían y te los pueden llevar hasta la puerta de tu casa.
En entrevista con Dexter N quien lleva más de 5 años en el negocio de la compra-venta de pistolas y rifles de asalto, detalló que primeramente él es centroamericano y llegaba varias veces al río Suchiate entre los límites de Tecún Umán, veía cómo pasaban productos de primera necesidad a territorio mexicano, al igual que cemento, combustible entre otras cosas pero en la noche, es donde observaba cuando pasaban cajas de artefactos explosivos por lo cual decidió juntarse con los vendedores hasta volverse uno de ellos.
“Yo soy guatemalteco inicié a los 18 años ahora ya tengo 23, tengo poco tiempo en el negocio del armamento, pero con nuestro DPI que es el Documento Oficial Identificación y con el permiso que da el gobierno nosotros vamos a adquirir la que queramos, pero las más pedidas son las pistolas calibre 9 milímetros, esas me las dan a unos 20 mil pesos mexicanos la tengo en reventa a 25 mil. Me gano la diferencia rápido y sencillo al igual que los cartuchos el precio es más accesible con un costo de 800 pesos que son 50 tiros. Si me piden la R15 con calibre 5.56 por ser un rifle de asalto esa anda a alrededor de unos 80 mil pesos al igual que la 7.62 conocida como ‘Cuerno de Chivo’ que anda por esos mismo precios”, expresó el vendedor.
Muy jodido uso 30 mil mensuales, las armas cruzan a México hasta por paquete, evadimos los retenes y se entregan hasta la puerta de tu casa, la mayoría trabajamos solo nuevas.
La venta tiene que ser con alguien que sea muy recomendado, porque podrían ponernos un cuatro o lo que llamamos una trampa, y quien nos lo pone se hace responsable de lo que pase, hasta el momento no he tenido ningún problema.
“Es bonito tener un arma entre las manos, algunos dicen que es la cola del Diablo, un solo descuido y es ahí donde acaba la vida de una persona. No le vendo a menores porque no saben lo que están comprando, por algo las crearon, pero yo solo vendo y no pregunto más, a veces es mejor no saber”, puntualizó el entrevistado.
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